Realizar una dieta equilibrada es
recomendable para todos pero está especialmente indicada para las personas
mayores. La alimentación saludable mejora y previene la aparición de muchas enfermedades.
Un estudio realizado por investigadores de la Clínica Mayo ha determinado que
los mayores de 70 años que siguen una dieta alta en carbohidratos tienen un
riesgo casi cuatro veces mayor de desarrollar deterioro cognitivo leve. Además,
el riesgo aumenta con una dieta rica en azúcares.
Los investigadores destacan la
importancia de que la dieta sea equilibrada en cuanto a la proporción de
proteínas, carbohidratos y grasas, puesto que cumplen una función importante en
el organismo.
El estudio ha sido financiado por
Instituto Nacional sobre el Envejecimiento. Para su realización se llevó a cabo
un seguimiento de 1.230 personas de entre 70 y 89 años que proporcionaron
información sobre su alimentación durante un año. Los expertos evaluaron la
función cognitiva de los participantes y los 940 que no presentaron signos de
deterioro cognitivo volvieron a someterse al seguimiento. Tras cuatro años, 200
de los mayores comenzaron a presentar síntomas leves de deteriores superiores a
los habituales para la edad.
Quienes presentaban altos niveles
en el consumo de azúcares y carbohidratos contaban con mayor probabilidad de
sufrir deterioro cognitivo leve. Del mismo modo, las personas que tenían una
alimentación rica en grasas presentaban un 42% menos de riesgo de padecer la
enfermedad. Igual ocurría con aquellos que consumían alimentos ricos en
proteínas, que reducían las probabilidades a un 21%.